EL VIRUS QUE NOS EMPUJÓ

El virus que hoy nos ha forzado a cambiar hábitos nos está dando un gran empujón. Los individuos, las organizaciones y los gobiernos han tenido que tomar medidas en medio de la incertidumbre y del desconocimiento. Como primera reacción, nos hemos replegado, nos hemos detenido, nos hemos aislado.  Pero en la medida en que el tiempo ha pasado, nos ha tocado adaptarnos, evolucionar.

Las circunstancias nos empujaron a hacer ahora, algunos cambios que nos habrían tomado años, o no los habríamos hecho nunca. Gracias a las medidas obligatorias de prevención, muchas industrias y actividades económicas y sociales dieron el salto a la virtualidad sin necesidad de profundos y extensos estudios y análisis. 

En la educación, por ejemplo, las instituciones educativas que tenían entre sus planes entrar al mundo virtual en un futuro no tan definido, hoy dictan todas sus clases por medios no presenciales. Desde la otra orilla, los niños que no tenían el computador o la tableta como uno de sus útiles escolares, hoy los usan como el principal de todos, y los estudiantes que usaban sus dispositivos para elaborar trabajos e interactuar con sus compañeros y profesores en tiempos extra clase, hoy los usan para la totalidad de su actividad académica.  

Otro ejemplo claro de adaptación forzada es la industria gastronómica. Los restaurantes que tenían amplia demanda para sus productos sin mayor esfuerzo en el mundo virtual, hoy no podrían vender ni un solo plato sin la ayuda de sus canales digitales. Y en el otro extremo, aquellos consumidores poco amigos del e-commerce, hoy colapsan las aplicaciones de domicilios, y compran víveres y elementos para la vida diaria desde su computador o teléfono móvil.

Estos son solo dos ejemplos de negocios que cambiaron repentina y permanentemente sus canales de atención y comercialización mediante la adopción de la tecnología gracias a la pandemia que nos tomó por sorpresa. Derivado de este reciente uso intensivo de la tecnología, muchos sistemas logísticos se han tenido que fortalecer y lo seguirán haciendo, la infraestructura de redes y telecomunicaciones se está explotando a niveles nunca antes vistos y deberá evolucionar con mayor velocidad, el conocimiento de tecnología se profundizará en todos los niveles, y será un paso hacia adelante que dimos sin pensarlo dos veces y que ya nunca tendrá reversa.